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La Mansión de Playboy: una casa entre luces y sombras

La mansión de Playboy, en Los Ángeles, fue uno de los íconos de la sexualidad y el descontrol con las mujeres más despampanantes del mundo.

Pero hoy, luego de un reportaje que fue emitido hace algunas semanas, la icónica casa ubicada en Los Ángeles es el ejemplo de las peores orgías, o por lo menos, así se muestra en varios reportajes que le dan la vuelta al mundo.

Desde la prostitución hasta el consumo desmedido de drogas, son parte de las historias de la casa construida por Hugh Hefner, quien falleció el 27 de septiembre de 2017.

En su momento, fue la casa más famosa en California, muchas personas iban solo a tomarse una foto frente a la popular casa.

La “Casa de las Conejitas” solía informar sobre las lujosas fiestas que allí celebraba Hefner y a las que solían asistir famosos y miembros de la alta sociedad.

La mansión tiene un estilo neo tudor que se encuentra en el número 10236 de la calle Charing Cross de Holmby Hills (Los Ángeles), corazón de California en los Estados Unidos.

Desde 1959 hasta 1974 la Mansión Playboy estuvo en Chicago, en una mansión de ladrillo y piedra erigida en 1899, hogar de Hugh Hefner, pero en 1974 fue sustituida por la Mansión Playboy de Los Ángeles.

Tiene 1952 metros cuadrados y construida por el arquitecto Arthur R. Kelly en 1927 y comprada por Playboy en 1971 por el precio de 1,2 millones de dólares.

En total tiene 22 habitaciones y en vida de Hefner contaba con una bodega, una sala de juegos, un zoológico privado, canchas de tenis, jardines, una cascada y una enorme zona de piscina (incluyendo una sauna, entre varios otros lugares).

Su popularidad llegó a tal nivel, que hasta existe un videojuego dedicado a la Mansión llamado Playboy: The Mansion. En mayo de 2016, Eugena Washington fue la última Playmate del Año anunciada por Hefner en su mansión.

El lado oscuro de la Mansión Playboy

El lado oscuro de la Mansión Playboy siempre se rumoró y hubo cientos de escándalos que el tiempo los fue borrando, pero un reportaje trajo a la luz los excesos de la connotada edificación de Los Ángeles.

Pero el desenfreno iba más allá de la gran Mansión de Playboy, pues al parecer, según un reportaje del diario Daily Mail, hubo otras subsidiarias que se prestaban a situaciones que rayaron en el delito.

Según el medio, británico, las menores fueron traficadas, drogadas, golpeadas, preparadas para la prostitución y violadas en mini mansiones que pertenecían a amigos de Hefner.

Las mini mansiones eran de una red de casas de Beverly Hills, donde eran alojadas las menores rechazadas de la principal mansión de Playboy

En el lugar se celebraban “fiestas libertinas” en las que ocurrían atrocidades contra las mujeres por estar envueltas en drogas y sexo forzado.

Jennifer Saginor, hija del médico de Hefner, recuerda que las jóvenes eran forzadas a prostituirse y drogarse.

La casa fue vendida en 2009 en un acuerdo inicial en donde Hefner podría habitar la casa hasta su muerte. Luego, a finales de septiembre de 2017, la Mansión Playboy fue cedida por 17,25 millones de dólares que restaban del contrato acordado, se estima que la casa costó 100 millones en total.

En marzo de 2018, el multimillonario inversionista Daren Metropoulos, el nuevo dueño de la mansión, firmó un acuerdo con el ayuntamiento de Los Ángeles que protege permanentemente el edificio de la demolición, aunque permite restauraciones y remodelaciones en él.

Metropoulos la emplea para actividades corporativas, eventos caritativos y funciones cívicas.

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