Cada vez son más las mujeres que viven en soledad
Cada año, son más las mujeres que viven en soledad, disfrutando su soltería y sin compromisos, es quizás la nueva sociedad a la cual hemos visto evolucionar.
Por ejemplo, según datos del INE de España, el 36% de las personas mayores de 50 años son solteras en España.
Pero un estudio realizado por Ourtime, la aplicación de citas especializada en la población silver, afirma que el 78% de ellos no considera que la soltería sea un problema.
Pero, además, el 81% lo asocia a sentimientos positivos como la libertad o la seguridad en uno mismo.
Tan mala opción no será si entre quienes tienen entre 50 y 59 años la soltería se ha triplicado en los últimos 20 años, solo en España.
Sobre ello, las mujeres que viven en soledad ya no son estigmatizadas como solterona; la vida independiente ha dejado de ser una imposición de las circunstancias para convertirse en una elección meditada.
Ejemplos de mujeres que viven en soledad
Algunos casos de famosas llaman la atención como mujeres que viven en soledad, tal es el caso de Linda Evangelista.
En una entrevista reciente con el The Sunday Times confesaba que hace años que no tiene una cita.
Y que no tiene ningún interés en regresar al mercado amoroso.
Pero otro caso sonado de mujeres que viven en soledad es Drew Barrymore quien se declaró en los mismos términos en 2021 cuando, después de tres divorcios y un par de relaciones fallidas más.
El control de Barrymore y su reinvención lo muestra en su talk show, que se ha convertido en el confesionario de muchas estrellas que, como ella, ya no están interesadas en las relaciones románticas o, al menos, en buscar activamente pareja.
Sharon Stone se lo explicó así: «Tengo muy buenos amigos hombres, pero creo que cuando se trata de la madurez emocional en las relaciones, los hombres y las mujeres parecen estar en puntos diferentes», le contó a Barrymore para, a renglón seguido, bromear sobre cómo el único hombre de su vida era su perro.
Finalmente, entre las mujeres que viven en soledad nadie lo ha sintetizado tan bien como Fran Drescher, estrella de La niñera, que ahora ha vuelto a la primera línea de la actualidad tras liderar la huelga de Hollywood como presidenta del Sindicato de Actores y que superó un divorcio amargo después de que su marido le confesara que era gay.
“Conectar realmente conmigo misma ha sido un gran viaje porque ahora ni siquiera siento que tenga que estar en una relación. Ya estoy en una relación conmigo misma… y me va bastante bien”, expresó.